miércoles, 17 de julio de 2024

MENONITAS, EDUCACIÓN Y DIVERSIDAD CULTURAL

  

Esto de las familias menonitas que no llevan a sus hijos a los centros educativos tradicionales trajo un revuelo inusitado ya que hay diferentes miradas sobre el tema. Y aparte de las autoridades que se vieron en la necesidad de expresarse y con divergencias, siempre hay gente para opinar acerca de los demás, eso es así. Hay jurados vocacionales y autodidactas absolutamente para todo lo que existe y en todas partes. Hay atrevidos idóneos, ligeros para el juzgamiento, que contribuyen a que sea más la gente que critica y condena a priori, que la que escucha, intenta aprender y empatizar. Es triste.

La segunda reflexión que me viene al corazón es que si hubiésemos puesto en práctica la ley de Educación Pública 18437/09 que dice en su Art. 17: “El principio de laicidad asegurará el tratamiento integral y crítico de todos los temas en el ámbito de la educación pública, mediante el libre acceso a las fuentes de información y conocimiento que posibilite una toma de posición consciente de quien se educa.” Seguro estaríamos mucho mejor preparadas y preparados para el abordaje de estos desafíos de convivencia multicultural inagotables y crecientes en los que estamos inmersos. Ocupados en disfrutar la belleza de la diferencia y no padecerla como preocupación.

Sin entrar en definiciones por consideración a sus variantes, podemos decir entre generalidades que las comunidades menonitas son cristianas, practican el bautismo a adultos, se originan en la reforma protestante y deben su denominación a un ministro destacado de entre sus líderes. Prefiero no extenderme para no errar, y si es que son basados en autoridades masculinas exclusivamente, quiero decir que no lo comparto, aunque al menos es un patriarcado declarado, no como en las sociedades occidentales imperantes en que el machismo se disfraza para pasar desapercibido y así hacer todo el daño que pueda solapadamente. La cultura menonita es particularmente interesante para analizar la manera en que los pueblos migrantes se enfrentan a situaciones de adaptación a la nueva realidad social que les toca habitar mientras se esfuerzan por conservar sus costumbres y tradiciones. Al parecer prefieren no mezclarse con los sistemas sociales imperantes ni con la modernidad o tecnología, excepto que sea utilizada para desempeñar tareas laborales.

En este sentido, no voy a hacer juicios de valor sobre una cultura que además de desconocer cabalmente, me llama a respeto como tal y como debe ser.

Más allá de definiciones, Rossel y Mc Andrew (2000) en un estudio realizado en Quebec a través de la observación participante, concluyen que es de gran importancia identificar las alternativas que los docentes desarrollan al enfrentarse con grupos de diferentes culturas.

De igual manera, los estudios realizados en España por Campoy, Pantoja y Delgado (2006) aportan insumos para buscar alternativas para el diseño de programas de integración que sean la base de una educación intercultural mejor enfocada.

Es por ahí. Nunca cerrando las puertas lograremos diálogo e intercambio, paz y desarrollo plural.

Los cultos y practicantes afroumbandistas padecemos el prejuicio irracional como toda repulsión, de que nos hostilicen sin saber lo que somos por un discurso hegemónico eurocéntrico, estereotipante, racista, odiador y excluyente que acepta únicamente sus propios paradigmas, normalizando el ultraje constante a las tradiciones sagradas de los pueblos oprimidos por las invasiones colonialistas, originarios indígenas y africanos esclavizados.

Es por eso que ante problemáticas de discriminación religiosa hacia cultos y practicantes afroumbandistas, fue necesario hacer un alegato ante Naciones Unidas denunciando tales acosos. Así como lo leen. De allá vinieron recomendaciones que el gobierno debería poner en práctica para mejorar su calidad democrática, que de eso se tratan las normas en una sociedad republicana.

Actualmente en la Institución Nacional de Derechos Humanos trabajamos en eso.

Aquí dejamos invitación: Con coordinación de Lic Oscar Rorra y Mae Susana Andrade y en el marco del Mes Afro; próximo 24 de julio 18hs en la INDDHH Bv. Artigas 1532 y Palmar REUNIÓN ABIERTA DEL GRUPO DE TRABAJO para luchar contra Intolerancia hacia Religiones de Matriz Afro en Uruguay. Este grupo; sociedad civil diversa e Institución Nacional DDHH, surge a raíz del Informe Alternativo que enviara el Grupo ATABAQUE al CERD/ONU fin de año pasado sobre casos reiterados y graves de intolerancia religiosa en Uruguay contra terreiros y practicantes. Se trabaja en la Preparación de un escrito para el Estado uruguayo a efectos de "bajar a tierra" las recomendaciones que llegaron del Alto Comisionado de Naciones Unidas por el racismo religioso de parte de algunas intendencias y organismos públicos que han sufrido personas y templos afroumbandistas en Uruguay.

Si se respetara más y se juzgara menos, tal vez nos hubiéramos ahorrado toda esta movilización y el sufrimiento de mucha gente que porta sólo y nada menos que la dignidad de su autenticidad, aquello con lo que se identifica.

Prevenir es posible desde el sistema educativo, de lo contrario, siempre estaremos apagando incendios.

Trabajamos para tener una educación antirracista por principio y multicultural como dice la ley.

Aunque nadie le haga caso.

Susana Andrade

 

(En la foto: Pastora Carola Tron, Valdense, Mae Susana Andrade, Sic. Heba Smith (Islam), Ing. Clara Villalba –Católica)

 


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